Como preparación al sacramento de la Confirmación que se realizó en la parroquia el pasado 13 de Noviembre y en atención a lo dispuesto por nuestro Obispo se logró tener varios encuentros con los futuros confirmandos disponiéndolos para su Confesión.
Uno de los encuentros se tuvo en nuestra capilla, donde el sacerdote realiza el acto penitencial, que recalca la importancia de la confesión.
Los jovenes despues de las reflexiones, y de realizar los pasos propios para su reconciliación y el perdón de sus pecados; entonces se confiezan. De este modo reciben la absolución de manos del sacerdote.
Dentro del sacramento; como iglesia profesamos nuestra Fe, manifestamos el CREDO, que resume las principales verdades de Nuestro Señor Jesucristo, las cuales creemos para nuestra salvación.
Tienen en sus manos "la Luz de Cristo", simbolizada con ese Cirio. Que a la luz de la fe nos guía en su palabra, su presencia viva en la Eucaristía, y con la Efusión del Espíritu Santo.
La comunidad de la iglesia, los acompaña en este compromiso como confirmados, y saben que se tiene una obligación para la educación en la Fe.
Como pastor de nuestra comunidad; nuestro pastor y obispo, da la bienvenida a aquellos jóvenes que nos se habían bautizado. Y realiza este sacramento, a los nuevos cristianos católicos, sus padres y padrinos los acompañan en su compromiso de educación en la fe.
Reciben su luz, la efusión del Espiritu Santo, la unción del Santo Crisma y se derrama sobre ellos el agua de vida nueva.
Este sacramento perdona sus pecados, y los reconcilia con Dios.
En compañía de sus Padrinos, cada confirmado se acerca al Obispo, para recibir el signo de la cruz, y son ungidos con Crisma; que simboliza la consagración de la persona a Dios.
Una vez organizados, el orden es de destacar, en los fieles, y la asamblea dentro de nuestra capilla.
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